Cultivado en interior

Iluminación: SANlight LED Q6W

Medio de cultivo: Coco, humus de lombriz, perlita

Nutrientes: BIOtabs guerrilla tabs

Maceta de fieltro de 11 L

Fase de crecimiento 18/6: 4 semanas (sin técnicas de entrenamiento)

Fase de floración 12/12: 8 semanas

Lavado de raíces: 2 semanas

 

Por Stoney Tark

Recibí un paquete de semillas feminizadas OGKZ de Humboldt Seed Organization y la verdad es que, con unos parentales tan especiales como OGKB y Zkittlez, las expectativas en cuanto al sabor y al aroma eran, sin duda alguna, altas. Para el cultivo de la OGKZ, decidí utilizar un sustrato orgánico equilibrado y bien aireado compuesto por coco, humus de lombriz y perlita y, como alimento, las tabletas Biotabs de liberación lenta. En cuanto a la iluminación, opté por unas lámparas LED 230W de SANlight L.E.D.

Fase de crecimiento 18/6

Tras 24 horas en un vaso con agua, empezaron a asomar las primeras raíces. Estaba deseando verla crecer y hacerse grande, así que la planté en un pequeño vaso de plástico hasta que llegase la hora del trasplante. Mi idea era que pasara unas 4 semanas en la fase vegetativa antes de florecer, por lo que me decanté por una fase de crecimiento 18/6 en el que la planta recibiría solo una pequeña cantidad de agua diaria. Para garantizar la absorción de micro y macronutrientes, cubrí la superficie con una capa de nutrientes.

Después de 7 días, la plántula tenía un aspecto radiante, con las dos hojas verdaderas asomando. Como no quería que se convirtiera en una plántula alta y desgarbada, la coloqué a un metro de distancia de la lámpara de cultivo, lo que favoreció un crecimiento sano y el desarrollo de un tallo repleto de pequeñas yemas. Tras 10 días, ya casi a medio camino de la fase vegetativa, empezaron a emerger las hojas secundarias, en esta ocasión con foliolos mucho más alargados y dentados. En ese momento, la temperatura era de 23°C y la humedad, según mi higrómetro, del 72%.

A los 21 días, la planta había adquirido el aspecto de un árbol de Navidad formado por un gran cogollo central y varias ramas laterales. Aun no midiendo más de 15 cm, por su estructura se podía intuir el desarrollo de una planta muy densa que habría que vigilar de cerca durante la floración para poder asegurar una buena circulación del aire y evitar así la aparición de Botrytis. Había llegado el momento del trasplante, para el que utilicé una maceta de fieltro de 11 L y el mismo medio de cultivo que en el vaso inicial.

Tras 28 días en un vaso de pequeñas dimensiones, la planta había alcanzado los 22 cm de altura. El tallo central tenía un grosor de 1 cm y un aspecto realmente robusto. En cuanto a las ramas inferiores, habían rodeado la planta en su totalidad y estaban repletas de yemas. No se utilizó ningún tipo de técnica de entrenamiento y ya estaba lista para florecer

Observaciones acerca de la fase de crecimiento:

• La OGKZ presenta numerosas ramas inferiores y se asemeja a un árbol de Navidad.
• Vegetación muy densa, con un aspecto aterciopelado.
• Estructura baja y achaparrada, ideal para cultivar en espacios pequeños.
• Sin signos de deficiencia o marchitamiento. Crecimiento feliz y saludable.
• Grandes hojas con foliolos dentados de unos 15 cm.
• Hojas resinosas incluso en la fase vegetativa, lo que siempre es un excelente punto de partida.
• Crecimiento de unos 22 cm antes del trasplante.

Fase de floración 12/12

La OGKZ fue colocada en un armario de cultivo en el que pasaría 8 semanas. Destacar que, a efectos de este grow report, no se le aplicó ninguna técnica de plant-training, ni siquiera la poda. Tras una semana de floración, superó los 30 cm de altura, lo que equivale a un crecimiento de casi 8 cm por semana. En general, su comportamiento estaba siendo extraordinario y sus hojas ya miraban hacia el cielo.

Durante las horas más calurosas, la temperatura rondaba los 25°C, mientras que la humedad relativa bajó hasta el 50%. Sin embargo, durante las últimas 4 semanas de la floración, decidí ir reduciéndola aún más hasta un nivel inferior al 40%, puesto que la Zkittlez es bastante propensa a padecer oídio y problemas de humedad.

Para el día 15 de la fase de floración, la planta había crecido ya de manera notable tanto verticalmente como lateralmente, con una enorme cantidad de ramas inferiores que parecían formar una falda de cogollos, algo que no es nada fácil de encontrar. El nuevo crecimiento era mucho más resinoso, con cierta tendencia a rizarse hacia dentro debido a dicha cantidad de resina.

Para el día 23, la planta había finalizado su "espigamiento" y su altura era de 40 cm. La verdad es que, para una planta de tamaño tan reducido, el peso que soportan sus ramas inferiores y tallo central era realmente considerable. Es más, el espacio entre los nudos era tan ajustado que ha conseguido hacerse un hueco entre mis productoras favoritas. El desarrollo de sus grandes hojas laterales parecía haberse frenado, aunque seguían mirando hacia el cielo exactamente como en la fase vegetativa.

Esta belleza, tras 30 días con un fotoperiodo de 12/12, regalaba una deliciosa fragancia de mango coronada por unas notas dulces y terrosas. Sin embargo, al restregar mi nariz contra sus aún pequeñas flores, noté cierto aroma a melocotón fresco, a mango y a masa de galleta. Los cogollos eran tan densos y compactos que resultaba casi imposible moverlos para inspeccionarlos. Sus hojas, cubiertas de tanta escarcha como los mismos cogollos, le otorgaban un aspecto realmente resinoso.

Habiendo pasado 40 días desde el inicio de la floración, decidí alimentarla solamente con agua para asegurarme de que el lavado de raíces durara al menos 2 semanas, ya que es la mejor manera de obtener sabores y aromas propios de una genética tan extraordinaria como esta. Sus flores no podían ser de una calidad mejor: dotados de un aroma realmente delicioso, con un elevado ratio cáliz-hoja ideal para manicurar.

Para la llegada de la séptima semana, la planta ya estaba totalmente cubierta de cogollos resinosos y duros como rocas distribuidos, sobre todo, por el tallo central y por las ramas inferiores, todos con la misma calidad y el mismo tamaño.

En el día 52, los pistilos había adquirido un tono marronáceo y los cogollos habían alcanzado su máxima plenitud. Las pequeñas hojas pegadas a las flores también estaban cubiertas por una densa capa de resina. Un sueño para cualquier amante de las extracciones.

La planta fue cortada de manera oficial tras 57 días y colgada en el cuarto de secado durante 10 días. Al comienzo del mes de mayo, que es cuando la planta fue finalmente cosechada, la temperatura y humedad en el sur de España pueden llegar a ser muy elevadas y podrían provocar la aparición de mildiu y de botritis. En líneas generales, estoy muy satisfecho con los resultados obtenidos. Cosechar 27 g de una planta cultivada en un tiesto de 11 L y alimentada solamente con nutrientes orgánicos es todo un logro.

Observaciones acerca de la fase de floración

• Altura total: 45 cm.
• Estirón de 22,8 cm a 45 cm durante el espigamiento.
• Sin signos de deficiencia o marchitamiento.
• Fragancia de mango y tierra
• Numerosas ramas inferiores.
• Aspecto aterciopelado.
• Gran cantidad de resina.

Conclusión

Los cogollos son prietos, pegajosos y emanan un delicioso e intenso aroma a frutas que se hace notar desde la primera calada. Me quedé realmente impresionado con la capacidad productiva de esta variedad y estoy convencido de que, en una maceta más grande desde un inicio, con un mayor aporte de nutrientes y con alguna técnica de entrenamiento, las cosechas pueden llegar a ser aún más extraordinarias. Los productores de hachís caerán rendidos ante esta increíble genética y con la densa capa de resina que cubre cada centímetro de su cuerpo.

Debido a sus dimensiones, OGKZ es ideal para cultivar en armarios pequeños. Eso sí. Recomiendo encarecidamente no infravalorar la importancia de una buena ventilación puesto que, en caso de no haberla, algún insecto o enfermedad no deseada podría acabar apoderándose de ella.