Blue Fire es el resultado de cruzar dos de nuestras genéticas más demandadas: Blue Dream y Fire OG bx1. El resultado es un híbrido con cosechas que impresionan por su alta calidad, y cogollos que rezuman un delicioso aroma a frutos del bosque. Sin duda una joya que cualquier cannabicultor debería probar al menos una vez. Stoney Tark nos cuenta todos los secretos sobre el cultivo de esta genética y qué resultados podemos esperar.
Cruce: Blue Dream x Fire O.G BX1
Entorno de cultivo: interior, con iluminación LED SANlight (2ª generación, serie Q5)
Medio: fibra de coco e hydroton (50/50)
Nutrientes: Flora Nova Grow + Bloom de GHE, HESI multivit, HESI Powerzyme
Maceta: tela, 30 l de capacidad
Periodo vegetativo (18/6): 28 días
Floración (12/12): 73 días
Había recibido un pack de tres semillas feminizadas de Blue Fire y estaba deseando ponerlas a germinar. La variedad se compone de Fire O.G BX1 y de Blue Dream, conocida por su delicioso sabor afrutado y por sus increíbles rendimientos, y como buen fan de las genéticas intensas con notas a fruta y gasolina, decido no perder más tiempo e introduzco una de las semillas en un vaso de agua. Mi idea es cultivarla en interior con iluminación LED SANlight, en una maceta de tela de 30 litros con sustrato compuesto de fibra de coco e hydroton, a fertilizar con Flora Nova Grow + Bloom de GHE, HESI Supervit y HESI Powerzyme.
Periodo de crecimiento - 18/6
Tras un par de días en el vaso de agua, la semilla germina y produce una larga raíz blanca, que trasplanto a la maceta de tela de 30 litros con sustrato de coco e hydroton. La temperatura en la habitación de cultivo es de 24 ºC y la humedad, del 70 %. Durante las dos primeras semanas, dejo que la plántula crezca tranquila sin realizar ningún tipo de poda. Aunque se trata de una variedad indica al 60 % y sativa al 40 %, los rasgos que desarrolla son claramente indica, con una estructura marcadamente OG Kush.
Pasados 14 días, ha alcanzado 15 cm de altura y su tamaño destaca sobre el resto de variedades que estoy cultivando. Al tratarse de una genética de floración rápida, HSO recomienda un periodo de crecimiento corto, por lo que decido no alargar la fase vegetativa más de 4 semanas. Empiezo a fertilizar con una solución de 0,6 ml de Flora Nova Grow y 5 ml de Powerzyme por litro, a la que añado también 3 gotas de Hesivit, y descubro que se trata de una variedad muy glotona, lo que se refleja en el robusto tronco que está desarrollando.
El día 22 su altura es de 26 cm. Ha desarrollado ya 4 internudos que se van distribuyendo en una estructura indica, y no deja de producir hojas cortas y anchas que brotan hacia arriba. Llegados a este punto, decido atar el brote superior para que la parte interior de la planta reciba la luz de forma más directa. De esta manera, se reducirá además la altura final y aumentará el rendimiento. Para potenciar este efecto aún más, quiebro el interior del tallo y de las ramas laterales. Aumento la fertilización a 2,5 ml de Flora Nova Grow y a la planta parece encantarle. No hay señales de carencias nutricionales y veo que las raíces han empezado a sobresalir por debajo de la maceta. Por lo que voy observando, se trata de una variedad de tallo grueso, follaje verde brillante y gran capacidad de enraizamiento.
El día 28 el atado del tallo parece haber surtido efecto y la planta muestra una apariencia muy arbustiva. Tengo curiosidad por ver qué rasgos de Blue Dream van apareciendo, pues de momento el aspecto es compacto y tupido. Al frotar el tallo, brotan aromas afrutados, terrosos y a hachís dulce combinados con un toque a lejía. Todo apunta a que se va a convertir en un auténtico monstruo de terpenos lleno de sabor.
La altura final antes de pasar a la floración es de 42 cm, con una estructura de ramas densas y un tallo central robusto.
Floración - 12/12
Tras cambiar el ciclo de luz a 12/12, me aseguro de que el nivel de humedad baje al 50 %, pues en la transición hacia la floración es importante que la humedad vaya descendiendo del 70 al 35 %. En cuanto a los nutrientes, sigo aplicando la misma solución que durante la fase vegetativa durante dos semanas más, tras lo que paso a fertilizar con 5 ml de Flora Nova Bloom por litro.
Llegados al día 15 de floración, el espacio internodal se ha estirado notablemente, y no dejan de surgir nuevos brotes. La altura es de 67,5 cm y me imagino que el estiramiento durará una semana más. El tallo está cada vez más gordo y denso, así que parece que en las 8 semanas que quedan de floración la planta va a seguir engullendo nutrientes.
Para el día 21, mide 81 cm de alto y 63 cm de ancho, llenando por completo el espacio de cultivo. El super cropping realizado durante la fase vegetativa ha dado lugar a unas ramas laterales densas y muy fuertes, y en lo que a aspecto se refiere, el fenotipo tiende claramente a rasgos de Fire OG, con unas hojas laterales y nuevos brotes que presentan características indica en su totalidad. Algunas de estas hojas he tenido que podarlas para que no molesten a los brotes inferiores, pero ya no aplicaré más podas ni técnicas de cultivo y dejaré que la planta florezca tranquila. Los internudos aparecen repletos de pistilos blancos.
Tras 30 días de floración, observo que la estructura ha seguido engordando y que los internudos están totalmente cargados, así que cuando la floración estalle del todo, por lo general habrá un largo cogollo por rama. Reduzco la humedad al 37 % y la mantengo así lo que queda de floración. La temperatura es de 23,2 ºC, pero teniendo en cuenta que estoy utilizando un deshumidificador, no me puedo quejar. En cuanto a la nutrición, complemento los 5 ml por litro de Flora Nova Bloom con 3 gotas de Hesivit y 5 ml por litro de Powerzyme. Para el día 35, los cogollos han empezado a adquirir forma y las hojas se han ido cubriendo de resina.
La estructura es densa y compacta, pero los cogollos crecen con forma alargada y le dan a la planta un aire sativa. Al frotarlos, se descubre un increíble aroma cítrico y a gasolina con toques a arándanos mentolados que hasta ahora no he encontrado en ninguna otra variedad. Se ha cumplido la mitad del periodo de floración recomendado, y decido que interrumpiré la fertilización cuando queden 2 semanas.
El ritmo de crecimiento de los cogollos es asombroso, y para el día 42 se adivina una cosecha abundante cargada de terpenos y tricomas. El tallo central es increíblemente denso, los internudos se amontonan y no hay señal alguna de carencias nutricionales. Los cogollos son ultrapegajosos y al tocarlos dejan una resina aceitosa en los dedos que huele de maravilla. El aroma sigue siendo a arándanos mentolados con toques a gasolina cítrica y la resina no para de acumularse por toda la planta. ¡Estoy deseando utilizarla para realizar hachís!
El día 50 los cogollos aparecen completamente hinchados, y han desarrollado tonalidades verde lima claro junto con unas hojitas apretujadas totalmente cubiertas de resina. Al más puro estilo Kush, su consistencia es sólida y cuesta pellizcarlos, además de que presentan un perfil de terpenos totalmente irresistible. La temperatura se mantiene en 24,2 ºC, con una humedad del 36 %. Para optimizar el sabor y la calidad del humo, es importante que durante el aclarado las plantas utilicen todas las reservas de nutrientes, incluyendo las sales minerales que se hayan ido acumulando durante el cultivo, por lo que, durante las 2 semanas de floración que quedan, paso a regar solo con agua, enriquecida únicamente con 5 ml por litro de Powerzyme. Los cogollos están cada vez más gordos y aparecen envueltos de pistilos naranja chillón.
Llegados al día 65, cuando quedan solo 5 jornadas para completar los 70 días de floración recomendados, la planta aparece completamente cargada de flores y de tricomas, por lo que podré aprovechar los restos del manicurado en su totalidad. Los cogollos, que se amontonan en todas y cada una de las ramas, han adquirido el tamaño y la dureza de pelotas de golf, y que hay que hacer un montón de fuerza para poder pellizcarlos. Decido dejar secar la planta durante 3 días antes de realizar la cosecha, así que finalmente obtengo un periodo de floración de 73 días. Al colgarla, me doy cuenta de lo pesada que es teniendo en cuenta que solo mide 94 cm, y nada más hacerlo el armario de secado se llena de intensas notas dulces, afrutadas y a gasolina con matices a arándanos.
Sabor y efecto
Tras 15 días de secado a 15 ºC y con una humedad del 50 %, los cogollos están listos para el curado. El aroma que emanan es una mezcla intensa de Kush, limón y frutos del bosque, y al abrirse se une también un fuerte olor a hachís terroso. El efecto es potente e inmediato, como el de las buenas OG Kush, y aunque presenta tintes de creatividad, en general provoca una sensación relajante acompañada en todo momento de un sabor increíble.
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